En mis clases de español y francés, creo un ambiente inmersivo usando actividades interactivas como desarrollo de vocabulario, ejercicios de gramática y práctica de conversación. Incorporo recursos multimedia y escenarios de la vida real para que el aprendizaje sea atractivo y culturalmente relevante. Los estudiantes participan en discusiones grupales y trabajo en pareja, con evaluaciones periódicas para seguir el progreso y brindar retroalimentación para mejorar.