Productores de música e ingenieros de sonido, utilizamos las capacidades ampliadas de los estudios para extender las composiciones a un dispositivo para organizar y componer (DAW: Logic Pro, ProTools, Ableton Live, OneStudio, Cubase, Reaper, Reason, etc.). Esto ha hecho que el estudio de grabación se convierta en un metainstrumento, para dar forma a composiciones enteras. En mi opinión, ya no somos compositores de música, pero somos compositores de sonido. Como productor musical, no solo el instrumento tocado es decisivo en el resultado final, sino que también los elementos de fondo, que se pueden escuchar o sentir a lo largo del proyecto, marcan una gran diferencia.