1- Personalización: Ya sea en clase individual o grupal, las lecciones se adaptarán a tus necesidades, tu tiempo y tus intereses. 2- Sin estrés: ¡Te voy a motivar hasta que olvides que estás aprendiendo! ¿Conoces ese tipo de “contenido seco” -gramática, vocabulario, conjugaciones, etc.-? ¡Vas a aprender sin darte cuenta si estás abierto a equivocarte y reírte! Nos vamos a centrar en la satisfacción de sentirte capaz de adquirir una nueva y vibrante habilidad. Y ENTONCES es donde ocurre la magia: la confianza es la nueva protagonista del viaje. 3- Cultura: Partiendo de la base de que cada lengua es un ente vivo, todos los contenidos de mis clases están ligados a factores sociales y culturales. El español, una lengua muy extendida, ofrece una variedad cultural tan grande, en tantos ámbitos, que quienes se sumergen en esta lengua no pueden evitar sentir empatía. 4- Amor: Mi meta personal para todos mis alumnos es que se enamoren del español. Quiero despertar en ellos el deseo de seguir desarrollando el idioma como una habilidad para toda la vida, no sólo para un examen. 5- Diversión: Enseñar español es mi pasión. Cuando pones tu corazón y tu mayor esfuerzo solo hay UN resultado: un final feliz.